La roja insignia del valor
Situada en la guerra civil americana narra la particular transformación de Henry Wilson, un joven idealista, recién alistado para participar en el conflicto, y que va a asistir a su bautismo de fuego.
La historia comienza en los preliminares a la primera batalla en la que este soldado va a verse inmerso. Su personal punto de vista y su reacción ante el conflicto se encuentra jalonada de una expresiva descripción de los paisajes y personajes de la contienda. El acento está puesto en su personal tormento interior: las dudas de si será capaz de mostrarse firme como un hombre en el campo de batalla: "-¿Alguna vez has pensado que podrías ser tú quien saliera huyendo, Jim? -preguntó. Y al terminar la frase se rió como si hubiese pretendido hacer un chiste...".
Todo el relato transcurre en unas escasas jornadas (la batalla narrada apenas ocupa dos días) y éste es uno de los puntos más interesantes de la novela, como el propio Crane expresa: "Oh, sí, no tiene importancia, Henry -dijo-. Creo que en aquellos días era bastante estúpido -y habló como si hubiesen transcurrido años", y a la vez una de sus dificultades a la hora de terminarla: parte de la trama se sucede cuando Henry se extravía, apenas unas horas, y su dilema moral se entremezcla con unas cuidadas e impresionistas descripciones del entorno, que pueden desanimar la lectura. Sin embargo, el increíble desarrollo del mundo interior del personaje supera ese obstáculo.
A la vez, y es lo que más destacan los críticos de la novela, la guerra aparece por primera vez descrita como lo que es. No es el escenario de gestas heroicas ni de exaltación de las virtudes masculinas. Es simplemente un escenario donde todas las actitudes humanas tienen cabida, eso sí, con cierto matiz antibelicista: "De nuevo sentían el empujón del entusiasmo. Miraron a su alrededor con orgullo enaltecido, sintieron una confianza renovada en las adustas y siempre fiables armas que llevaban en las manos. Se sintieron hombres".
Es muy interesante en la novela la descripción psicológica del protagonista y sus cavilaciones. Me ha parecido instructiva la manera en que su propia percepción y la realidad que le circundan se entremezcla: de forma que no se describe un paisaje, sino que se describe su mundo, o el mundo como él lo ve. Y la trama avanza desde dentro y desde fuera.
La propia evolución del protagonista es interesante: es un hombre, y como tal, susceptible al miedo, con limitaciones, con reacciones heroicas incluso, entretejidas de coraje y orgullo. Despreciable a veces, en otras produce compasión.
En general, lo recomiendo. Como hito es interesante conocerlo. Como lectura, debido a su brevedad es muy fácil de leer. En la mayoría de los pasajes engancha, y esperas vere cómo el personaje alcanza la roja insignia del valor.
Autor: Stephen Crane
Editorial: Rey Lear
Edad: 14+
Nota: 3,5/5
Género: narrativa, bélica.
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